La vendimia en el festival cultural de Morena
En esta actividad cultural tuve la oportunidad de compartir mis poemas con las comunidades que asistieron, comí un delicioso cacao de mi vecina que vino a vender de Zacatelco y saludé a buenos amigos de juventud.
No, no se vendió
pude compartir sonrisas con algunos,
ver a otros caninando engrandecidos por ser voceros
otros estaban atrapados en sus protestas
protestas vagas que se confunden con los tragos
que se confunden con las líneas que surgen del viento
de esa realidad escondida
líneas que se van fortaleciendo en el tiempo
en la práctica que atravieza los años
Monzán el nombre del que señala con dedo flamígero
y qué señala el trabjo, el trabajo de otros y quizá
ese atrevimiento por mostrar, por salir del abrazo
de las banquetas, de la banca fría, del alcohol.
El olor se esparce María
el olor del cacao, de los tamales
tu olor invade el jardín, y se encende mi rostro
de la sabiduria a que te enfrnta el no te conozco de unos
por andar en la vendimia y de otros señañando tu éxito como fifí.
Mujeres
Para Tania y Antonia Netzahualcoyotl.
Todas con la esperanza del día
con sus aretes sus blusas
con su corazón de viento
con su alegría en la piel
desde la laguna, el cerro
desde la tierra caliza, desde el lugar de las papas
brillan los pepenados
las capas
son luciérngas los corazones.
El movimiento
Camina el cuadro con sus eléctricos trazos
entre la bruma del mar nacen estrellas.
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